CARTA PARA UN “NO ALCOHOLICO”

El no era alcohólico, solo tomaba en fiestas, reuniones familiares y con amigos, nunca solo. Pero no era alcohólico, podía controlarlo perfectamente y para demostrarlo, dejó de tomar tres días, al cuarto día estrelló su camioneta contra un poste, se envalentonó con la policía, terminó en los separos y al día siguiente, cuando la familia pudo sacarlo, prometió no volverlo a hacer y lo cumplió, a partir de ese momento no dejó de tomar y se mantuvo ebrio todo el tiempo.
Un “no alcohólico” después de una reunión con sus amigos, le reventó el ojo a su mujer de un puñetazo. Pobrecito, no sabía lo que hacía, estaba “borrachito”, otro, mucho más peligroso aún, llegó de una fiesta familiar “un poco tomado”, vio una rata en la cuna de su bebé y la mató a palos, también al bebé. No había tal rata. La madre en su desesperación atacó al marido a mordidas y patadas, los vecinos la amarraron y ella hoy está en el psiquiátrico, como una persona muy peligrosa y agresiva. El marido sigue libre y tranquilo, porque “pobrecito, no sabía lo que hacía, estaba borrachito y no se daba cuenta”.
El “no alcohólico” jura que puede controlarlo, que no hay ningún problema, que puede manejar porque está muy consciente, es más, ya ni siquiera está “tomado”, está “crudo” que no es lo mismo y por ende, tiene todos sus reflejos bien y está despierto y tranquilo. Claro que puede manejar, hasta que adormilado, avienta la camioneta desde un puente y mata a toda su familia y no pasa nada, como estaba bajo los influjos del alcohol, pobrecito, no se daba cuenta.
Dos muchachos, en plena juventud, se mataron en su auto a toda velocidad bajo los influjos del alcohol, pero no pasa nada, no lastimaron a nadie, solo se mataron y ya.
Un verdadero y auténtico no alcohólico está en la AA consciente de que tiene un problema con el alcohol, que debe hacer todo lo posible por controlarlo y lo controla, que conoce el peligro de un solo trago y los riesgos que de ese trago derivan. Que conoce la capacidad del alcohol de distorsionar la realidad hasta tal grado que ni cuenta se da uno de lo que está haciendo y de lo peligrosa que se vuelve la persona inconscientemente bajo sus influjos.
La persona que te dice que no es alcohólica y que puede controlarlo, es en realidad un psicópata y asesino en potencia y creo que es necesario que alguien se lo diga.